Opinión

¿Dónde está el personal médico y de enfermería?

FOTO: IMSS/CUARTOSCURO.COM

El talento –o capital humano– se desarrolla y se concentra en los estados más competitivos, puesto que son lugares en los que se pueden obtener mejores beneficios sociales y económicos, así como altos niveles de prosperidad y bienestar. Esta situación no es excluyente del talento de médicos y de enfermería. Como consecuencia, el personal de salud entre los estados del país está distribuido de forma inequitativa lo que, a su vez, tiene consecuencias en el bienestar de los ciudadanos. 

Como evidencia de la brecha del personal de salud, en el Índice de Competitividad Estatal (ICE) 2023, la Ciudad de México –la entidad más competitiva– cuenta con la mayor tasa de médicos generales, enfermeros y enfermeras en contacto con el paciente (5.8 por cada mil habitantes) y de médicos especialistas (2.4 por cada mil habitantes). Por otro lado, Chiapas –una de las tres entidades menos competitivas– cuenta con la menor tasa de personal médico con especialidad (0.5), y el número de médicos, enfermeros y enfermeras por cada mil habitantes es de solo 2.9. 

La disparidad de localización del talento del sector salud también es regional. El centro cuenta con la mayor tasa de médicos especialistas (1.11 por cada mil habitantes), mientras que en el sur no dispone de un médico de especialidad por cada mil habitantes, pues la tasa es de 0.77. El rezago del sur se agrava con la falta de acceso de la población a las instituciones de salud: alrededor de 24% de las personas que trabajan tienen acceso a este tipo de instituciones, mientras que en el norte la cifra es más del doble, con 51%.

También existe un problema a nivel nacional con la generación de nuevo talento médico. Según las cifras oficiales, en 2016 la tasa de médicos especialistas por cada mil habitantes fue de 0.98 y la tasa de médicos, enfermeros y enfermeras en contacto con el paciente de 2.94, mientras que en 2021 estas tasas fueron de 0.99 y de 2.99 respectivamente. Es decir, en seis años no ha habido un aumento notable en las tasas del personal de salud y está estancada la generación de talento médico en México. 

La oferta limitada de formación para médicos en las universidades, así como la baja disponibilidad de plazas para iniciar estudios de especialización, son realidades a las que hoy se enfrentan los aspirantes a médicos en el país. Además, la naturaleza demandante de la profesión implica que los estudiantes requieren apoyo económico constante durante un periodo de tiempo extenso, situación que solo una pequeña proporción de la población puede sostener. En su conjunto, esta situación es alarmante ya que México se encuentra cada vez más lejos de alcanzar los niveles requeridos por los estándares internacionales, y de contar con la capacidad suficiente de cubrir las necesidades en salud de los mexicanos.

Es necesario crear las condiciones necesarias en los estados para atraer y retener el talento médico. A nivel país hay que formar más personal médico y de enfermería para adecuarnos a la demanda poblacional de estos servicios. A nivel estatal se necesita aumentar la competitividad y fomentar mejores condiciones salariales e infraestructura suficiente para la formación del personal médico. Así, que los mexicanos tengan acceso equitativo a las instituciones de salud y superar el estancamiento en el que se encuentra el país.

Publicado en El Economista Capital Humano. 

29-06-2023