Investigación

Brecha salarial de género

Aunque la brecha de ingresos por género en México es menor que en otros países, las condiciones laborales no son equitativas 

A nivel mundial, las mujeres tienden a ganar menos por su trabajo que los hombres. El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) con el apoyo de Bayer, INTERprotección, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y el Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi), midió la magnitud de la brecha de ingresos entre mujeres y hombres en diferentes sectores en México y otros países.

El IMCO concluye que una menor brecha de ingresos no refleja mayor equidad en el mercado laboral. Aunque México tiene una brecha de ingresos de 14%, menor que la de Islandia o Reino Unido, esta cifra tiene como trasfondo que muy pocas mujeres en edad productiva entran a la economía remunerada, la mayoría de ellas (70%) ganan menos de dos salarios mínimos, y pocas crecen durante su trayectoria profesional hasta llegar a puestos de toma de decisión que están mejor pagados.

Este problema estructural responde a la serie de barreras que enfrentan las mujeres para entrar, permanecer y crecer en sus empleos. Entre ellos, una mayor carga de trabajo no remunerado para ellas, que se traduce en jornadas laborales más cortas. Adicionalmente, prevalecen los estereotipos de género que causan una mayor concentración de fuerza laboral femenina o masculina en determinados sectores y ocupaciones. Este fenómeno, conocido como segregación ocupacional, reduce los ingresos promedio de las mujeres en comparación con los hombres. 

La brecha de ingresos en México

En México, la proporción de mujeres de 15 años o más que trabajan o buscan un empleo ha oscilado entre 40% y 45% en los últimos 17 años. Las mujeres que participan en la economía en promedio obtienen ingresos laborales menores que los hombres, y la diferencia es más amplia en los sectores en donde se concentran más mujeres.

  • En 2022 la brecha de ingresos es de 14%, es decir, por cada 100 pesos que recibe un hombre en promedio por su trabajo al mes, una mujer recibe 86 pesos. 
  • La brecha de ingresos se cerró durante la pandemia, hasta alcanzar 11%, debido a que las mujeres con menores ingresos salieron del mercado laboral, aunado a una caída en los ingresos de los hombres. A partir de 2021 se observa como la brecha de ingresos regresa lentamente al nivel previo a la pandemia, a la par del regreso de las mujeres al mercado laboral. 
  • Las entidades federativas con mayor brecha de ingreso entre hombres y mujeres son Oaxaca, Colima e Hidalgo. Las mujeres ganan 27.1%, 25.3% y 24.9% menos en comparación con los hombres, respectivamente. 

¿Por qué existe la brecha de ingresos?

No hay una explicación única ni generalizada detrás de la brecha de ingresos, puesto que depende de varios factores que inciden en las dinámicas económicas como:

  • Horas de trabajo. Las mujeres dedican más del doble de tiempo que los hombres a actividades no remuneradas, por lo que tienen menos tiempo disponible para trabajar por un ingreso. 
  • Posición jerárquica. Las mujeres tienden a estar concentradas en puestos de entrada y pocas alcanzan gerencias o direcciones por falta de flexibilidad para compaginar su vida personal con su carrera profesional.
  • Nivel educativo. Las mujeres con mayor preparación tienden a alcanzar puestos más altos y en sectores mejor pagados. 
  • Concentración de personas del mismo sexo en ciertos sectores y ocupaciones. Existe una alta representación de mujeres en sectores con un menor nivel de ingresos.

Brecha de ingresos por sectores

Los sectores de la economía mexicana donde los hombres ganan más que las mujeres son información en medios masivos; otros servicios no gubernamentales; y comercio al por menor. Estos sectores tienden a concentrar a más mujeres con condiciones laborales desfavorables. Por ejemplo, casi 6 de cada 10 personas que trabajan en comercio al por menor son mujeres, la mayoría de ellas se emplean en la informalidad y con jornadas más cortas que los hombres, por lo que generan ingresos 26% menores. 

En contraste, hay algunos sectores en los que las mujeres ganan en promedio más que los hombres. Aquellos en donde esta diferencia es más amplia son servicios inmobiliarios, construcción y minería.  Estos sectores se caracterizan por contar con una baja representación de mujeres, que además acceden a mejores empleos. Por ejemplo, solo 4% de las personas que laboran en construcción son mujeres, pero la mayoría cuenta con estudios de licenciatura, y acceden a puestos administrativos donde consiguen mayores ingresos promedio que los hombres. 

Las brechas de ingresos que se observan en México a nivel sectorial también se observan en otros países de América Latina. El caso más marcado es el de construcción donde también Chile, Colombia y Perú presentan una brecha en favor de las mujeres. 

Medir la brecha de ingresos permite un primer nivel de análisis sobre las desigualdades entre ambos sexos, si bien se necesita profundizar en las dinámicas laborales de los sectores y las organizaciones que los conforman. Para avanzar en el cierre de la brecha de ingresos por género, el IMCO Propone:

  • Romper con la segregación ocupacional de género para que más mujeres participen en sectores y ocupaciones con mayor remuneración.
  • Realizar un autodiagnóstico de la brecha de ingresos entre hombres y mujeres  dentro de los centros de trabajo con el objetivo de profundizar en las razones detrás de ella.
  • Avanzar hacia la transparencia de ingresos con criterios establecidos para la remuneración en cada puesto de trabajo, así como para los incrementos salariales.