- Disminuirán los tiempos de traslado de las personas y se sustituirán 506 vehículos obsoletos, entre autobuses, microbuses y vagonetas.
- Su uso reducirá 322 toneladas de CO2e al año.
La ampliación de la Línea 3 del Metrobús, que correrá a lo largo de 4.3 kilómetros de Etiopía a Río Churubusco, traerá grandes beneficios en favor de la movilidad en la Ciudad de México, destacando una mejor conectividad, competitividad, seguridad de los y las usuarias, calidad en el servicio, reducción de tiempos de traslado y protección climática y ambiental.
La ampliación de la línea BRT (autobús de tránsito rápido, por sus siglas en inglés) sobre el Eje Cuauhtémoc, ha generado diferentes posturas en torno al impacto que tendrá en sus alrededores, sin embargo, este tipo de proyectos ha comprobado beneficios tangibles. Un ejemplo es la Línea 7 del Metrobús, que ha logrado reducir en un 43% los tiempos de traslado y un 28% de sus usuarias y usuarios dejaron de usar el automóvil particular. Respecto a las emisiones contaminantes, la misma línea 3 del Metrobús, en sus 17 kilómetros de recorrido actual, ha logrado una reducción de 20,000 toneladas de Dióxido de carbono (CO2e) equivalente por año.
En una ciudad donde se realizan más viajes en transporte público colectivo (50.9%), que mediante transporte privado (22.3%), aumentar la cobertura y la calidad del primero eleva el acceso a oportunidades y destinos a una gran parte de la población y reduce desigualdades.
Organizaciones especializadas en movilidad, transporte y ciudades, como Bicitekas, CAMINA Centro de Estudios de Movilidad Peatonal, la Comisión de Movilidad de COPARMEX CDMX, Greenpeace México, el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), El Poder del Consumidor y Transita Seguro México, destacan los siguientes beneficios con la ampliación de Línea 3 del Metrobús:
- Reducción en tiempos de traslado con mayor cobertura en horario de servicio.
- Mayor seguridad en estaciones y autobuses con iluminación y cámaras de videovigilancia las 24 horas, monitoreados por la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
- Sustitución de 506 camiones obsoletos (autobuses, microbuses y vagonetas).
- Reducción de 322 toneladas de CO2e al año.
- Conexión segura con el CETRAM Zapata, y las líneas 3 y 12 del Sistema de Transporte Colectivo Metro, con el corredor del Trolebús (cero emisiones) del eje 7 Sur, el circuito bicentenario del sistema RTP.
- Vehículos en operación con certificado ambiental Euro 5 Plus (con filtro de partículas que reduce en más de 99% las emisiones de material particulado).
- Demanda estimada de atención diaria entre 13 mil y 15 mil usuarias y usuarios.
- Reducción del uso del automóvil.
- Mejoras en intersecciones, tales como cruces peatonales a nivel y rampas en banquetas y estaciones.
Además, expusieron los atributos que han sido verificados en los diferentes sistemas BRT de México y a nivel local, tales como:
- El 17% de las personas usuarias han dejado su automóvil particular en casa, lo que se traduce en menor tránsito y reducción de contaminantes.
- Un vehículo articulado, con capacidad de 160 personas pasajeras, sustituye 107 automóviles particulares, mientras que un biarticulado, con capacidad de 240 personas, equivale a 160 automóviles particulares.
- Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de hasta un 95% por personas usuarias que dejan de su automóvil y de un 56% por personas usuarias que viajaban en servicios tipo microbús.
- Reducción de hechos de tránsito hasta en un 50% en ciertos corredores de BRT, tomando como base el antes y después de la implementación.
- Satisfacción del servicio en un 71.3% en sistemas BRT, en comparación con el 19.7% otorgado al transporte público convencional (micro, vagonetas, autobuses).
- Reducción de hasta un 30% en tiempo de traslado de las personas derivado de la presencia del carril confinado, estaciones fijas y programación del servicio.
Las organizaciones firmantes reiteran la importancia de continuar con la construcción y ampliación de redes de transporte público estructurado, bajo los principios de transporte integrado, sustentadas técnicamente, que ofrezcan calidad en el servicio y que se apeguen al contexto urbano. Las instituciones respaldan los proyectos que beneficien, en primer lugar, a quienes se mueven cotidianamente en el transporte público de la ciudad, que desincentiven el uso del automóvil y la motocicleta, y contribuyan a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, además de brindar una mejora en la movilidad y seguridad del resto de las personas usuarias de la vía.
Además, recordaron que la saturación vehicular provoca pérdidas de más 47 mil millones de pesos anuales dentro de la Zona Metropolitana del Valle de México, de los cuales 36 mil millones afectan directamente a los usuarios de transporte público sujetos a la congestión. Los signatarios señalaron que: “un sistema estructurado, que no padezca la congestión, como el Metrobús, impulsará la productividad y mejorará la calidad de vida de los habitantes de la ciudad. Además, contribuirá a una movilidad más eficiente y a una ciudad más competitiva y justa”.
Finalmente, enfatizaron en la necesidad de privilegiar el cruce peatonal en estaciones e intersecciones y contemplar el espacio necesario para ciclistas que circulan en la vía, tomando como referencia la Guía Ciclista de la CDMX de Secretaria de Movilidad.