Investigación

Los hogares de altos recursos ganan 15 veces más que los de bajos recursos

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos del Hogar (ENIGH) 2022. El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) analizó la información que contiene para conocer las condiciones socioeconómicas de la población y responder preguntas como ¿De dónde obtienen sus ingresos? ¿Qué es lo que más consumen los hogares? o ¿Cómo cambian las decisiones financieras dependiendo del nivel de ingresos de las familias? Profundizar en ello permite obtener información detallada para diseñar recomendaciones que impulsen el crecimiento de México.

La ENIGH 2022 llega después de un periodo de inestabilidad económica derivada de la pandemia por covid-19, lo que permite comparar la situación económica de los hogares respecto al inicio de la crisis en 2020, así como a los niveles observados anteriormente (en 2016 y 2018). A grandes rasgos, las cifras reflejan una recuperación en los ingresos provenientes del trabajo y un ajuste en los patrones de gasto de las familias en cuanto al gasto en alimentos, educación y salud.

La encuesta también permite analizar las brechas que existen entre grupos sociodemográficos dependiendo del estrato socioeconómico, el sexo o la entidad federativa. Los resultados muestran que, a pesar de los incrementos observados en los ingresos corrientes, estas desigualdades persisten, y la disparidad entre las posibilidades de gasto de los hogares del país aún están lejos de cerrarse. Estos son los principales resultados de los ingresos y los gastos de los hogares:

Ingreso: En promedio, durante 2022 los hogares percibieron 22  mil 437 pesos mensuales, de los cuales, nueve de cada 10 pesos provienen de ingresos corrientes como remuneración por trabajo o renta de propiedad, mientras que el monto restante corresponde a ingresos por percepciones financieras y de capital como préstamos.

  • Empleo: La principal fuente del ingreso corriente de los hogares es el empleo, pues los ingresos por trabajo han aportado más del 60% de los recursos percibidos desde 2016.

  • Transferencias: Las pensiones, jubilaciones, becas, remesas y/o programas sociales representan en conjunto el segundo mayor ingreso. Cada hogar recibió 3 mil 643 pesos al mes, en promedio, por este concepto.
  • Disparidad en ingresos

    • Por nivel socioeconómico: En promedio, los hogares con mayores ingresos del país percibieron 66 mil 899 pesos mensuales; en contraste, aquellos con menores recursos registraron ingresos promedio de 4 mil 470 pesos. Es decir, los hogares del decil 10 (el 10% de los hogares con mayores ingresos) percibieron 15 veces más ingresos que los del decil 1 (el 10% con menores ingresos).

  • Por entidad federativa: Baja California Sur tuvo los mayores ingresos promedio del país, y Chiapas los más bajos. La diferencia entre ambos fue de 56%, es decir, por cada 100 pesos que percibió un hogar en Baja California Sur, uno en Chiapas recibió 44.
  • Por sexo: El ingreso mensual monetario promedio para los hombres alcanzó 9 mil 762 pesos, y para las mujeres 6 mil 360 pesos, lo que se traduce en una brecha de ingresos por sexo de 35%. Esto significa que por cada 100 pesos de ingresos percibidos por un hombre, una mujer gana 65. La disparidad también se reflejó entre los hogares con jefatura de hogar femenina y masculina.

Gasto: El gasto promedio por hogar fue de 20 mil 88 pesos al mes. De ellos, 84.5% se destinó al gasto corriente, es decir al consumo de bienes como alimentos, ropa, artículos de cuidado personal, salud, y educación. El gasto monetario promedio de los hogares incrementó 17.2% respecto a 2020.

  • Alimentos: El grueso del gasto mensual se destina a la alimentación (38%) y, en promedio, los hogares gastaron 5 mil 19 pesos mensuales en ese rubro. Sin embargo, la proporción es mayor para los hogares de menores ingresos, quienes dedican 51% de su gasto a esos productos; en los hogares de mayores ingresos, la proporción es de 28%.
  • Educación: El gasto promedio en educación se redujo entre 2016 y 2022, al pasar de mil 593 a mil 307 pesos mensuales. En cuanto a los distintos estratos socioeconómicos, los hogares con menores ingresos dedican 5% a la educación, mientras que los hogares del decil 10 destinan 14% de su gasto a ello.
  • Salud: El gasto en salud registró una disminución de 6.8% respecto a 2020 (al pasar de 481 pesos a 448 pesos mensuales por hogar). Sin embargo, en 2022 gastaron un monto 1.3 veces mayor al destinado al cuidado de la salud en 2018. En los hogares de ingresos más altos, el gasto promedio mensual en salud fue de mil 457 pesos, mientras que los hogares de ingresos bajos destinaron 187 pesos por mes al cuidado de la salud de sus integrantes.

El análisis comprensivo de los resultados de la Encuesta permite identificar los pendientes en materia de desigualdad de ingresos y gastos, así como los cambios en la composición de los mismos. En ese sentido, los datos provistos en la ENIGH son una herramienta fundamental para focalizar las propuestas y políticas públicas encaminadas al apoyo de los hogares con menores recursos y a la corrección de las disparidades que persisten en el país.